Las 4 leyes de la colorimetria capilar
Primera ley de la colorimetría
La primera ley, por su parte, establece que los colores fríos (violeta, azul y verde) dominan sobre los colores cálidos (rojo, naranja y amarillo). El color neutro, en este caso, sería el café. De esta manera, si van a combinarse tintes de color azul y amarillo en cantidades iguales, el resultado será un color con mayor tendencia hacia el azul.
Segunda ley de la colorimetría
Por otro lado, la segunda ley establece que, al combinar colores opuestos del círculo cromático, estos se neutralizarán. Es decir, el azul neutraliza con tonos muy naranjas, así como el amarillo neutraliza al color violeta y el rojo lo hace con el color verde. Esta ley es muy importante para la correcta aplicación tanto de matices como de neutralizantes de tonos.
Tercera ley de la colorimetría
Por su parte, la tercera ley establece que un tinte no puede ser aclarado con otro tinte; de esta forma, no es posible bajar el nivel del color si se aplica primero un tono oscuro y luego un tono claro. Si el estilista quisiera obtener este resultado, es necesario aplicar en primera instancia un producto de decoloración para el cabello.
Cuarta ley de la colorimetría
Por último, la cuarta ley nos dice que es posible aplicar sobre un tono cálido un tono frío, mientras que no podemos aplicar un tono cálido sobre un tono frío. Esto se debe a que los tonos fríos neutralizan los cálidos.
Al conocer estas leyes, los estilistas pueden determinar con mejor exactitud qué color emplear de acuerdo al resultado esperado por el cliente.